domingo, 13 de marzo de 2016

BREVE SEMBLANZA DE AZORÍN







BREVE SEMBLANZA DE AZORÍN

    José Augusto Trinidad Martínez Ruiz (Azorín)  nació en Monóvar (Alicante) el 8 de junio de 1873, durante la II República española, por lo que habría que llamarle «El último romántico».  Tomo unas interesantes notas de la página de la Casa Museo de Azorín, fundada en 1969, cuyo director es el erudito José Payá Bernabé, (cuya página web necesita inversión de la CAM, su Boletín Informativo, no está digitalizado, como una forma de potenciar la figura del inquilino):
      ...tenía tres años [José Martínez], anteriormente había residido en la casa de la calle de San Andrés, situada en el centro de Monóvar. En esa fecha, 1876, la calle tenía el mismo nombre que en la actualidad, Marqués de Salamanca entonces alcalde de Monóvar- (..). La casa perteneció a Loreto Ruiz, tía de la madre de José Martínez Ruiz, María Luisa Ruiz Maestre, quien sería la legataria.  

   Francisco Pi y Margall, nació en Barcelona en 1824. Era hijo de un obrero textil. Estuvo en el seminario (1831-1837) y estudió Derecho; muy joven, fue miembro de la sociedad Filomática, donde conoció a las principales figuras del romanticismo catalán. En 1847 fijó su residencia en Madrid. Colaboró en diferentes periódicos y en la redacción de diversas obras. En 1848 completó la obra "Recuerdos y bellezas de España", de Piferrer. En 1851, cuando gozaba ya de un cierto prestigio, inició una monumental Historia de la pintura, pero sus consideraciones sobre el cristianismo durante la Edad Media provocaron una fulminante condenación eclesiástica y legal. Su participación activa en política se produjo a partir de 1854. Segundo presidente de la I República española (11-06-1873) a (18-07-187). 
    La familia tenía una casa veraniega en “La Cañada”, en Monóvar, donde empezó a observar la naturaleza y sus primeras descripciones líricas. De joven le gustaba jugar a partidos de pelota, afición de la época que le entusiasmaba.
    Era el mayor de nueve hermanos. Su padre tenía hacienda, era natural de Yecla, ejercía como abogado en Monóvar, su madre natural de Petrel.
    Su hermana menor Amparo, escribió en la revista literaria de Sureste Sigüenza, Alicante, nº2, 1952, un artículo titulado «Mi hermano Pepito», en el cual escribe: «mas el “pequeño filósofo” no se desdeñaba en contestar a las cartas infantiles que su hermana le dirigía desde el Pensionado». Parece ser que de joven Pepito no era muy familiar.
     Estudió José Martínez en la escuela de Monóvar y en Yecla (Murcia) el bachillerato con los padres Escolapios. Luego Derecho en Valencia, Granada y Salamanca y no acabó la carrera, en su juventud demostró, como no podía ser de otra manera, en aquel convulso final del siglo XIX, su  rebeldía y anarquismo de ideas, propios del romanticismo (libertad y revolución). En 1895 colabora en la redacción de El Mercantil Valenciano y en Bellas Artes. Se instalará en Madrid.  Jugando con el periodismo empezó a firmar con los seudónimos: Juan Lis, Fray José,  Ahriman, Cándido, hasta encontrar en 1904 el de su gusto: Azorín (Azor, ojo avizor),  tomado del  personaje de su novela Antonio Azorín (1903). El apellido Azorín es frecuente en la comarca del Alto Vinalopó, en la guía telefónica de Alicante (2004) capital  aparecen 44  personas con ese primer apellido, 19 en Novelda y 4 en Monóvar.   
      Azorín esta considerado uno de los más exquisitos y refinados escritores del último tercio del Siglo XIX y mitad del XX, periodista vocacional, inventor de la  crónica parlamentaria  y quien acuñó la denominación de origen, si se me permite la expresión: «Generación del 98», también la de El Grupo de los Tres (Pío Baroja, Maeztu y el propio Azorín). Fue un escritor prolífero, cultivó todos los géneros literarios, incluso la poesía en sus primeros años como ya demostrara el escritor José María Merino en diciembre del 2002, en el Casino de Monóvar con el libro Cumpleaños lejos de la Casa (Obras Completas). Su oficio y del que vivía fue el periodismo, apasionado de la política, diputado por cinco ocasiones: Ponteareas (PO) en 1914, por Sorbas (AL) en 1916, y Subsecretario de Instrucción Pública.
   José Ferrándiz Lozano, azoriniano y autor de Azorín. La cara del intelectual entre el periodismo y la políticas, (2001). Nos comenta en un artículo aparecido en el Diario «Información» de Alicante, 22 de enero 2005, que:
«La locura que Azorín tuvo por el Quijote es un ejemplo extremo, válido para alguien como él que hacia 1955, a sus ochenta y dos años, declaró en una entrevista que lo tenía leído diez o doce veces; ni siquiera fue capaz de precisar».
     Azorín es uno de los escritores alicantinos más conocidos junto a Gabriel Miró y Miguel Hernández (Luis Beresaluze  en su libro Trinidad de la palabra, Ecu 2003, donde se relata de una forma original las tertulias semanales en el Cielo de los tres escritores). Los primeros años fueron difíciles y duros, logró colaborar en El País, El Progreso, después en otros de más importancia y difusión, como El Imparcial; luego, durante muchos años, en ABC; también en revistas, como Revista Nueva, Juventud, Arte Joven, Alma Española y España; en el Diario de la Marina de La Habana y otras publicaciones hispanoamericanas.  Fue objeto de un homenaje en Aranjuez el día 23 de noviembre de 1913, organizado por Ortega y Gasset y Juan Ramón Jiménez, al que se sumaron la mayor parte de la intelectualidad española, solidarizandose con él por sus intentos fallidos de entrar en la Real Academia Española, que al fin consiguió en 1924 a través de su amigo el conservador Antonio Maura, con el discurso «Una hora de España» uno de los más largos dados en la Academia, y que ha sido comentado por José Montero Padilla, en la colección Cástalia Didáctica nº 33, Madrid, 1993. Existe un libro antiguo y de ocasión que actualmente vale 150 euros en Librería Renacimiento titulado: Fiesta de Aranjuez en honor de Azorín. De varios autores, incluido Azorín,  de la Residencia de Estudiantes, 1915, Madrid, 1ª edición. 20x13. 96 pág. 
     Actualmente entre los más destacados expertos sobre  Azorín se encuentran: José Payá Bernabé, José Ferrándiz Lozano, el hispano estadounidense Inman Fox, y su biógrafo Santiago Riopérez Milá.
 Autor de numerosas crónicas parlamentarias, ensayos, novelas artículos (5.500), que utilizó en sus libros. Castilla (1912) uno de sus libros más célebres y que mejor definen su estilo conciso y donde nos muestras su magisterio, de pintar paisajes impresionista con su pluma de orfebre.  
 Hemos de destacar el amor de Azorín por la obra cervantina que nos legó  artículos repartido en sus múltiples ensayos críticos literarios. Algunos de ellos los podemos leer en la edición de ErlY Danieri Visión de España Colección Austral nº 226, primera edición de 1941, se trata de una antología de breves artículos azorinianos, entre los que se hallan los dedicados a Cervantes y al Quijote «El caballero del verde gabán» y «Cervantes y José Hernández»,  El libro mejor acogido será, sin duda La ruta de don Quijote (1905), y, posteriormente con motivo del año jubilar cervantino 1947, por el nacimiento de Cervantes (1547), vieron la luz dos volúmenes: Con Cervantes, (1947) y Con permiso de los cervantistas (1948), 108 breves artículos en  extensión. El buen Sancho (1954). Que como comentó Ángel Cruz Rueda, el primero consta de recopilación de escritos anteriores más veinticinco nuevos en 1935 a 1944, el segundo datan de 1944 a 1947, insertos en prensa y otros inéditos. Sería muy deseable recopilar toda la obra cervantina de Azorín en un libro con motivo de este fugaz cometa del IV Centenario.
   Leyó Azorín una conferencia en el Ateneo de Madrid, en abril de 1905, titulada «Don Quijote en casa del caballero del Verde Gabán», donde  preguntó a los asistentes:
    «¿Qué creéis que importa más para el aumento y grandeza de las naciones: estos espíritus solitarios, errabundos, fortalecen y peregrinadotes del ideal, o estas otras prosaicas, metódicas, respetuosos con la tradición...?»
   
  Ramón Fernández Palmeral
La Ruta de Don Quijote, 2005